Casa Haga es un proyecto de vivienda campestre para una familia con dos hijos, está ubicada en Rionegro, a 30 minutos de la ciudad de Medellín.
Como base fundamental para el diseño, está la creación de espacios donde compartir en familia, disfrutar del tiempo libre y el aire campestre son fundamentales. Los espacios se generan a diferentes niveles siguiendo la topografía quebrada del lugar y dando la posibilidad de establecer muy claramente las zonas de uso privado y las zonas comunes y de encuentro.
Su forma posibilita que en la mayor parte de los espacios exista una conexión directa con la naturaleza y el paisaje, formando de esta manera un mirador continuo sobre el valle de San Nicolás. Adicionalmente los materiales cálidos y de origen natural como la madera, y la presencia de abundante vegetación en el interior y en el exterior establecen ambientes de tranquilidad, descanso y conexión con la naturaleza.
Casa Haga es un proyecto de vivienda campestre para una familia con dos hijos, está ubicada en Rionegro, a 30 minutos de la ciudad de Medellín.
Como base fundamental para el diseño, está la creación de espacios donde compartir en familia, disfrutar del tiempo libre y el aire campestre son fundamentales. Los espacios se generan a diferentes niveles siguiendo la topografía quebrada del lugar y dando la posibilidad de establecer muy claramente las zonas de uso privado y las zonas comunes y de encuentro.
Su forma posibilita que en la mayor parte de los espacios exista una conexión directa con la naturaleza y el paisaje, formando de esta manera un mirador continuo sobre el valle de San Nicolás. Adicionalmente los materiales cálidos y de origen natural como la madera, y la presencia de abundante vegetación en el interior y en el exterior establecen ambientes de tranquilidad, descanso y conexión con la naturaleza.
Casa Haga es un proyecto de vivienda campestre para una familia con dos hijos, está ubicada en Rionegro, a 30 minutos de la ciudad de Medellín.
Como base fundamental para el diseño, está la creación de espacios donde compartir en familia, disfrutar del tiempo libre y el aire campestre son fundamentales. Los espacios se generan a diferentes niveles siguiendo la topografía quebrada del lugar y dando la posibilidad de establecer muy claramente las zonas de uso privado y las zonas comunes y de encuentro.
Su forma posibilita que en la mayor parte de los espacios exista una conexión directa con la naturaleza y el paisaje, formando de esta manera un mirador continuo sobre el valle de San Nicolás. Adicionalmente los materiales cálidos y de origen natural como la madera, y la presencia de abundante vegetación en el interior y en el exterior establecen ambientes de tranquilidad, descanso y conexión con la naturaleza.